Las primeras medidas económicas tomadas por el nuevo Gobierno de Alberto Fernández que afectan al sector del real estate.
En el inicio del año, Damián Tabakman, presidente de la Cámara Empresaria de Desarrolladores Urbanos (CEDU) cuenta sus impresiones sobre el panorama actual:
¿Qué opina de las medidas económicas tomadas por el Gobierno? ¿Cómo cree que impactarán en el mercado y la actividad de la construcción inmobiliaria?
Están bien orientadas. A medida que vayamos viendo que la realidad macroeconómica se encamina ordenadamente -que parecería ser que es lo que ocurrirá- volverá la tranquilidad a los inversores. Imagino que antes de mitad de año comenzarán a reaccionar las ventas en los emprendimientos en pozo. Sobre todo, en el inicio se activarán a partir de los pesos que la gente va acumulando.
Por otra parte, con el abaratamiento del costo de construcción, se puede aprovechar mejor este contexto. Los precios de venta en dólares no bajaron o lo hicieron poquito por lo que los márgenes son interesantes. Sobre todo, en el segmento ABC1 más premium, me parece que desde el primer semestre comenzaremos a ver una reacción positiva de este mercado y esto se profundizará -en el buen sentido- a lo largo del año. Será un fenómeno paulatino, no explosivo.
En cuanto a los proyectos para clase media dependientes del crédito hipotecario y la recuperación del nivel de actividad del mundo del usado, la reacción será mucho más lenta. La gente tiene la percepción de que la mercadería está cara.
¿Y los inmuebles a estrenar cómo se verán afectados por la situación?
A los que ya se terminaron, que fueron construidos con el (valor del) dólar anterior, los veo en una situación más difícil. Donde creo que habrá una reacción positiva es en los lanzamientos nuevos que irán apareciendo a lo largo de este año dado que reflejarán los nuevos costos con el dólar postdevaluación y los valores de la tierra a la baja ya que, por la recesión, los últimos terrenos que se vendieron ya no eran tan caros.
Los desarrolladores que lancen productos con tierra menos onerosa y costos de obra postdevaluación, saldrán con valores atractivos y, con la confianza paulatinamente recuperada, la gente irá poniendo sus pesos en ello. Ese es el segmento que tendría más rápida recuperación durante todo este año.